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Guerra contra el Rey Exánime
Guerra contra el Rey Exánime
Localización: Rasganorte, príncipalmente
Resultado: Destrucción de Agonía de Escarcha, muerte de Arthas Menethil, asensión de Bolvar Fordragón como nuevo Rey Exánime, colapso de liderazgo de La Plaga
Combatientes
Comandantes y líderes
Bajas y pérdidas
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Anterior: Guerra en Terrallende
Concurrente: Guerra del Nexo
Siguiente: Operación: Gnomeregan, La Caída de Zalazane

La Guerra Contra el Rey Exánime es el nombre que reciben el conjunto de una serie de sucesos acaecidos en WotLK. Comenzó cuando el Rey Varian Wrynn ordenó atacar a La Plaga antes de saber que el Rey Exánime ya había enviado a sus ejércitos a atacar las capitales de la Alianza y la Horda.

Antecedentes[ | ]

Tras pasar 10 años logrando dominar a Ner'zul, Arthas Menethil despertó como el nuevo Rey Exánime, el comandante de La Plaga. Entre sus intenciones estaba la de eliminar a todas las razas mortales que pudieran oponerse a su dominio, empezando por las que forman la Alianza y la Horda.

Previo al lanzamiento de WotLK, tuvo lugar un evento mundial llamado la Zombie Infestation en el cual, las capitales de Azeroth empezaban a recibir misteriosos paquetes con grano infectado por la peste, al igual que ya le ocurriera al reino de Lordaeron en WC3RoC logo 16x32. Los ciudadanos no tardaban en convertirse en necrófagos al mismo tiempo que el caos se adueñaba de las principales ciudades. Las necrópolis volantes de La Plaga aparecieron en Kalimdor y los Reinos del Este y la Alianza y la Horda tuvo que unirse para luchar contra un enemigo común que atacó Orgrimmar y Ventormenta con sus ejércitos de abominaciones y vermis de escarcha. Tras resistir el embate, el rey Varian Wrynn y el Jefe de Guerra Thrall planearon una invasión al continente helado de Rasganorte con la idea de enfrentarse al Rey Exánime de una vez por todas.

El nacimiento de la Cruzada Argenta[ | ]

Uno de los mayores enemigos de La Plaga había sido siempre el Alba Argenta, la orden de paladines que había derrotado a Kel'thuzad en la antigua Naxxrramas que sobrevolaba Stratholme. De no ser por el traidor de Iñigo Montoya - ahora Thel'zan - Kel'thuzad hubiera sucumbido. El otro problema a que se enfrentaba La Plaga era la Cruzada Escarlata, no porque fueran excesivamente peligrosos sino porque estaba dirigida secretamente por Balnazzar, uno de los Señores del Terror que obedecía a la Legión Ardiente y que lucharon contra La Plaga cuando acabó la Tercera Guerra, así como por Barean Westwind que no era más que el disfraz en el que se ocultaba Mal'Ganis, otro Señor del Terror y archienemigo de Arthas durante el asedio de La Plaga a Lordaeron.

Con la intención de acabar con ambas amenazas, el Rey Exánime se trasladó en persona a Acherus: El Bastión de Ébano, que sobrevolaba el Enclave Escarlata donde, con la ayuda de los Caballeros de la Espada de Ébano comandados por Darion Mograine y portador de la Ashbringer Corrupta, inició un ataque sobre los emplazamientos de la Cruzada Escarlata de Villa Refugio y Nuevo Avalon. Tras reducir sus efectivos a cenizas y provocar la huida de sus miembros el Rey Exánime exigió a Darion destruir la Capilla de la Esperanza de la Luz, donde se encontraba el Alba Argenta. Darion guió a sus tropas e inició el combate de la Batalla por la Capilla de la Esperanza de la Luz. A pesar de su superioridad numérica, Darion se vio incapaz de usar los poderes oscuros de la Ashbringer Corrupta por estar bajo suelo sagrado. De repente Tirion hizo acto de presencia y le reveló que el Rey Exánime sólo lo utilizaba como cebo ya que su principal objetivo era él mismo. El propio Arthas apareció para darle la razón a Tirion, mientras el espíritu de su padre le recordaba a Darion quien era y por quien luchaba. Cuando Arthas se disponía a darle el golpe de gracia, Darion, consumido por la ira, le entregó Ashbringer a Tirion, purificándola en el acto y provocando la huida del Rey Exánime. Tras esto, Tirion decidió unir la antigua orden de la Mano de Plata con el Alba Argenta formando la Cruzada Argenta y encaminándose junto a los Caballeros de la Espada de Ébano hacia Rasganorte para combatir también al Señor Oscuro con la ayuda de la Alianza y la Horda.

Invasión de Rasganorte[ | ]

Pronto, los ejércitos más importantes de Azeroth se dirigieron cruzando el mar hacia norte para establecer sus posiciones de cara a la inminente invasión a los dominios del Rey Exánime. La Alianza envió a la Expedición de Denuedo liderados por Bolvar Fordragón desde el puerto de Ventormenta y desde el Puerto de Menethil mientras que en la Horda, los orcos hacían lo propio con la Ofensiva Grito de Guerra liderados por Garrosh desde Orgrimmar y los Renegados con la Mano de la Venganza desde Tirisfal. Ya en Rasganorte, tanto unos como otros recibieron la ayuda de viejos aliados como eran los natoescarcha y los taunka.

También los magos del Kirin Tor, que habían reconstruido recientemente Dalaran se habían trasladado a Rasganorte con la intención de luchar en la Guerra del Nexo contra Malygos, el dragón aspecto del Vuelo Azul que les había declarado la guerra. Rhonin ofreció Dalaran como punto de encuentro y descanso de los aventureros de la Horda y la Alianza donde se encontraban además el Pacto de Plata y los Atracasol liderados por Vereesa Brisaveloz y Aethas Atracasol respectivamente.

Primeras batallas[ | ]

Las primeras hostilidades comenzaron nada mas desembarcar la Alianza y la Horda en sus nuevos emplazamientos. Los soldados humanos de Valgarde sufrían para contener el asedio de los vrykul de Utgarde, siervos del Rey Exánime que había corrompido a su Rey mientras que la Horda tuvo que luchar contra los nerubianos de Azjol-Nerub que habían invadido Icemyst Village, el hogar de los taunka.

Contrataque de La Plaga[ | ]

Tras establecer y asegurar sus posiciones de retaguardia, los ejércitos avanzaron hacia las profundidades de Cementerio de Dragones donde las fortalezas de Hibergarde y Martillo de Agmar se encontraban bajo el ataque de Naxxramas, la necrópolis volante dirigida por Kel'Thuzad que había sido remodelada y mejorada tras el traslado desde su emplazamiento original en las Tierras de la Peste.

En este momento, el Rey Exánime comenzó a atacar los santuarios de dragón de esta región, levantando los cuerpos de dragonantes muertos bajo la forma de vermis de escarcha, de magma y de brasas. Los aventureros tuvieron que intervenir ante esta nueva amenaza y junto con la ayuda del Reposo del Dragón consiguieron contener a los dragones al mismo tiempo que derrotaban, una vez más y esta vez definitivamente, a Kel'Thuzad tras una dura batalla en el interior de Naxxramas.

Cuando se hubo sofocado el peligro más inmediato, la Alianza y la Horda enviaron a sus mejores guerreros a la cercana Angrathar: la puerta de cólera que servía de entrada a Corona de Hielo con la intención de enfrentarse cara a cara con el Rey Exánime.

References[ | ]

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